I
Hay que domesticar el instinto,
esta insensatez terrible
de alinear tu garganta con mi sexo
está dejando delfines muertoe en mi playa;
tus flechazos.
II
Descubri una grieta en tu armadura;
por ahí alimentas a los escopriones
que vienen a visitar.
III
Mi paso es a tus huellas
lo que el epigrafe alpoema.
IV
Todo se lo debo a tu arco;
la fortuna, el otoño, la hemorragia,
el verte sentada afilando tu cuerpo,
devorando niños a la hora de la cena
mientras marcas el compás de la muerte
con tus pezuñas doradas.
Cada entraña de tú estomago
espera mi visita.
V
Del zodiaco,
tú eres la más bonita.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Quejas y sugerencias